Balada triste de trompeta

España / Francia (2010) *

Duración: 108 min.

Música: Roque Baños

Fotografía: Kiko de la Rica

Guion y Dirección: Álex de la Iglesia

Intérpretes: Carlos Areces (Javier Granados), Antonio de la Torre (Sergio), Carolina Bang (Natalia), Manuel Tallafé (Ramiro), Alejandro Tejería (Motorista fantasma), José Manuel Cervino (Secretario), Manuel Tejada (Jefe de pista), Enrique Villén (Andrés), Paco Sagárzazu (Anselmo), Terele Pávez (Dolores), Fernando Guillén Cuervo (Capitán miliciano), Santiago Segura (Padre del payaso tonto), Sancho Felicidad (Coronel Salcedo), Juan Luis Galiardo (Ring Master), Felicidad Olayo (Sonsoles).

Un capitán miliciano pausa una función del circo y recluta a todos sus trabajadores para pelear con los milicianos de Líster.

Con su poco armamento y en inferioridad numérica se enfrentarán a los fascistas, muriendo la mayoría de ellos, aunque el Payaso Imbécil, con su disfraz y armado con un machete pelea bravamente y termina con un enorme número de contrincantes antes de caer herido.

En la cárcel le visita su hijo Javier al que aconseja que se realice de payaso triste, como lo fué su historia, diciéndole que solo puede ser feliz si opta por la venganza.

Y así lo hará. Acude a Cuelgamures, donde su padre trabaja con centenares de presos en la construcción del Valle de los Caídos y prende un barreno ocasionando numerosas muertes y dando permiso que algunos presos logren escapar, aunque su padre no lo consigue, ya que se cae y es pateado por el caballo del coronel Salcedo, al que Javier tira del caballo haciéndole perder un ojo al clavársele un cuchillo.

Años más tarde, en 1973, Javier debuta como payaso triste bajo las órdenes de Sergio, un hombre violento que maltrata a Natalia, su mujer, la trapecista, siendo un éxito su debut, ya que Javier aguanta como nadie los golpes y bromas de Sergio.

Indudablemente Javier termina enamorándose de Natalia, a la que anima a dejar a su marido, ayudándola a esconderse una noche que llega Sergio borracho para que no le pegue.

Y Natalia termina sintiéndose también atraída por él, por ser el único que se atreve a plantarle cara y vuelven a salir juntos, aunque, sorprendidos por Sergio les proporciona una tremenda paliza siendo Javier hospitalizado hasta que una noche obsesionado por Natalia y temiendo por ella huye, conociendo al llegar al circo a Natalia realizando el cariño con Sergio, al que agrede con un gancho, huyendo hacia el monte mientras Sergio es llevado por sus compañeros a un veterinario, salvando su historia, pero quedando convertido en un monstruo al que los niños rechazan, debiendo cerrar el circo.

Javier, oculto en el bosque, debe comer carne cruda de animales, hasta que un día es atacado por un jabalí, salvándose cuando abate al animal el coronel Salcedo.

Famoso por su colgante, Salcedo lo encierra y lo usa como perro de caza en cacerías a las que acude nuestro Franco, al que Javier le muerde la mano.

Consigue huír tras ello, habiéndose despedazado antes la cara con una plancha y con sosa cáustica, vistiéndose de payaso con un traje de torero y un gorro de obispo. Acabará con Salcedo y roba parte de su armamento con el que hace una matanza en un bar mientras escucha cantar a Raphael, siendo testigo del asesinato de Carrero Blanco.

Tras ello va a buscar a Natalia, que trabaja como vedette en un local, comprobando que antes salió con Sergio más allá de su monstruoso rostro.

La secuestra y la llevará hasta el Valle de los Caídos, escondiéndose en sus túneles, aunque Natalia se siente asustada al notar que se volvió loco.

Sergio los encuentra y llega con la policía, persiguiendo a la pareja con una pistola mientras estos huyen trepando a la cruz, perseguidos siempre por Sergio peleándose al llegar arriba del monumento hasta que al final Natalia, amenazada por Sergio se arroja al vacío al tener una colosal cinta como las del circo, aunque esta no podrá dominarla y muere.

Tras ello la policía detiene a los dos payasos que lloran amargamente en el furgón.

Calificación: 2