Gaby ha crecido entre algodones protegida por su poderosa familia. En contraste a sus hermanos, que se han decantado por su profesión, prioriza casarse con su novio de siempre y en todo momento, Frank, un tipo cariñoso, afable, respetable, atento, muy elegante, trabajador… En resumen: el hombre ideal. Su familia siempre y en todo momento se ha opuesto al link y, a lo largo de años, ha estado tramando para retrasarlo. No obstante, Gaby no flojea, y hará
todo lo que este en su mano para lograr que se celebre la boda; si bien comprende que Frank la respete y desee aguardar a ser su esposo, decide adelantar los sucesos. Mas, de pronto, Gaby se hallará con sus sueños hechos añicos.
