Farenheit 451 de Ray Bradbury
Farenheit 451, uno de las considerables clásicos de la ciencia ficción, otorga la crónica de un sombrío y horrible futuro.
Resumen del libro Farenheit 451
Guy Montag es un bombero. En la sociedad imaginada por la novela, de carácter distópico, los bomberos tienen la misión de quemar libros ya que, según el gobierno, leer impide ser contentos porque llena de angustia; al leer, los hombres empiezan a ser diferentes cuando tienen que ser iguales, lo que es el propósito del gobierno, que vela por que los ciudadanos sean contentos para que así no cuestionen sus acciones y los ciudadanos rindan en sus trabajos.
Al inicio de la novela el país de Montag está al límite de la guerra.
Montag conoce a una muchacha llamada Clarisse, que es señalada como loca por pensar. Clarisse cuenta que a ella y a su familia los tachan de «antisociales» porque formulan cuestiones, en lugar de que su ámbito las pregunte y las respondan ellos mismos. Ella dice que en el fondo es muy sociable. Es esa joven la que empieza a hacer en Montag la duda sobre si verdaderamente es feliz, además de despertarle la curiosidad sobre los libros. El jefe de Montag, Beatty, le dice que los libros sólo se utiliza para realizar sentir mal a la multitud. Es un hombre listo que sigue los particulares utópicos del gobierno, confiando completamente en el sistema que trabaja a toda la sociedad.
Montag acude a un incendio en el que había que quemar una casa de una mujer anciana que tenía una biblioteca. Antes de echar el petróleo, Montag toma un libro y se lo transporta escondido. La anciana no sólo rehúsa salir de su casa, sino que es ella misma quien le prende fuego con una cerilla. Esto impacta más a Montag y le hace pensar en relación han de valer los particulares por los que pelea aquella gente, cosa que aumenta su curiosidad.
La mujer de Montag, Mildred, fué manipulada ya hace tiempo por los particulares que el gobierno ha establecido en los ciudadanos, así como Montag, hasta que conoció a Clarisse.
Montag se acuerda de un viejo que conoció en el parque, un instructor de literatura llamado Faber. Como Montag tenía una colección de libros escondida, fruto de una curiosidad que había incrementado desde ese acercamiento, se transporta un ejemplar de la Biblia, como carnada para Faber. Le muestra al viejo instructor la necesidad de luchar para que los libros se queden sobre la ignorancia.
Diseñan un plan entre los dos para cumplir este propósito. Faber tiene premeditado ingresar en contacto con un impresor desempleado y con varios académicos exiliados amigos de él. Le brinda a Montag un dispositivo para que se logren sostener comunicados y sigan diseñando el plan, además de las ansias de Faber de oír los argumentos que otorga Beatty.
Al llegar a su casa, Montag encuentra a Mildred y a unas amigas hablando con la «familia». Molesto por su ignorancia y por ver que son incapaces de prestar cariño de hecho a sus maridos e hijos, saca un libro de poemas y lee uno. La señora de Phelps se pone a llorar y la señora de Bowles se enoja con él. Montag arrojó el libro al incinerador de la cocina. Faber le reprocha el haber hecho esto, ya que lo considera un error y una colosal imprudencia. Tras esto se va a trabajar al cuartel de bomberos.
Suena un aviso de alarma y marchan a atenderla Montag y Beatty. Cuando llegan al lugar Montag ve horrorizado que es su propia casa.
Al llegar, sale Mildred corriendo y se va en un taxi. Beatty le revela a Montag que fue ella quien logró la denuncia, pero que sus amigas ya habían hecho otra. Le ordena quemar él mismo la vivienda colocado junto con los libros. Beatty empieza a golpear y a ocasionar a Montag y cuando se brinda cuenta del dispositivo con el que Montag se comunicaba con Faber lo apaga, lo almacena en su bolsillo y le dice que va a seguir su señal para encontrar a Faber. Enfurecido, Montag quema vivo a Beatty con el lanzallamas.
Montag huye. Más allá de que se había ordenado una intensa búsqueda de parte de las autoridades, Montag consigue huír al bosque atravesando un río, dando con un grupo de individuos llamados «hombres libro», que resultan ser académicos dirigidos por un hombre llamado Granger. Granger le cuenta que la misión de ellos es ir por los bosques, teniendo conocimiento de los libros y memorizarlos para transmitirlos oralmente.
Mientras aseguran esta conversación, la guerra estalla y veloces aviones de guerra lanzan sus misiles hacia la ciudad, reduciéndola a cenizas. Montag se piensa a su mujer en un hotel totalmente ajena a eso que está próximo de ocurrir, hasta que es muy tarde. Después de la conmoción, los académicos retoman sus ocupaciones y parten en rumbo a la ciudad, siendo Montag el guía del sendero.