Daven siempre y en toda circunstancia se encargó de la Orden cuando Viggo faltó. Mas ahora que el boss ha vuelto y que no va a tener ese rol de mando, se ha marcado como misión que las Bonet respeten su forma de vivir y que se entreguen lo antes posible a la causa que defienden. No obstante, hay una Bonet que lo reta continuamente y que no es de su agrado. Alba es atrevida, desafiante y Daven está seguro de que va a exponer a los suyos más de la cuenta y de que puede ponerlos en un arduo problema. Se va a centrar en ella y en descubrir lo que es verdaderamente esa mujer, si bien sus prejuicios terminen jugándole una mala pasada y al final se halle deseando lo que jamás creyó que volvería a querer.