Resumen de la película Hotel Transilvania

 

Hotel Transilvania

Hotel Transylvania (2012) * USA

Duración: 82 min.

Música: Mark Mothersbaugh

Guion: Peter Baynham y Robert Smigel (Argumento: Dan Hageman, Kevin Hageman y Todd Durham)

Dirección: Genndy Tartakovsky

Drácula, le canta nanas a su pequeña vampirita, Mavis a la que educará y enseñará a volar, hasta que llega el instante en que le pide que le deje salir a comprender mundo, lo que su padre le impide, ya que le prometió a Marta, su mujer antes de que muriera, que la cuidaría.

Escoge por esto crear un hotel con apariencia de castillo, el Hotel Transilvania, en el que todos los monstruos tendrán refugio, debido a que hay 400 acres de bosque encantado a su alrededor y el país de los muertos vivientes.

En el hotel se alojarán monstruos tan conocidos como Frankenstein, El Hombre Lobo, El Hombre Invisibre, el Yeti o la Momia

Todos ellos y varios más se reunirán para la celebración del 118 cumpleaños de Mavis, que piensa que llegó el instante de que su padre le permita comprender mundo, soñando con ir al Paraíso, donde sus padres se conocieron – verdaderamente la isla de Hawaii.

Sabiendo que en algún momento ese instante llegaría, Drácula le otorga a su hija un período de 30 minutos para que vaya hasta el pueblo más cercano al hotel y regrese.

La chica sale feliz hacia el pueblo sin entender que su padre va tras ella vigilándola, no encontrando a nadie al llegar al pueblo debido a que es de noche, hasta que de repente sale un grupo de humanos dispuestos a terminar con ella armados con tridentes, antorchas y pan con ajo, más allá de que son ellos los que terminan ardiendo por error.

Mavis ignora que el pueblo que visitó era un montaje listo por su padre para hallar que se asustara y no deseara volver a conocer a los humanos, y que los teóricos humanos de todos modos eran zombis disfrazados.

Para Drácula lo sustancial es que consiguió su propósito y Mavis no quiere salir, por lo cual está contento, hasta que de repente ve mostrarse en el hotel a un jóven que dice nombrarse Jonathan, de 21 años.

Este le cuenta que le hablaron de un bosque alucinante y decidió proceder a conocerlo, observando así a los zombis ardiendo a los que siguió hasta el hotel.

El jóven piensa que llegó a una fiesta de disfraces, mientras Drácula teme que desee hacerles daño, por lo cual escoge echarlo del hotel, disfrazándolo como si de un monstruo más se tratara para no llamar la atención de los demás usuarios del hotel siendo la rata de Quasimodo, el cocinero, la única que olfatea la presencia humana.

Jonathan por su lado está feliz con la fiesta hasta que se otorga cuenta de que no es una fiesta de disfraces cuando ve un esqueleto y comprende que es verdadera y no un disfraz, apoderándose de él el pánico frente tanto monstruo real, por lo cual sale corriendo hasta terminar chocando con Mavis, que se siente muy interesada por él, al ser el único habitante del hotel “de su edad”, que regresa a escapar al darse cuenta de que el padre de la muchacha es el auténtico conde Drácula, que debe aclararle que no quiere tomar su sangre ni la de ningún humano, llena de microbios y grasas, por lo cual toma una sangre baja en colesterol.

Cuando va a expulsarlo hace aparición otra vez Mavis, y lo realiza pasar por un organizador que le asiste para elaborar la fiesta de cumpleaños de su hija, haciéndolo pasar por un primo de Frankenstein, “Johnnystein”.

Trata de expulsarlo del castillo por una salida de emergencia, pero es un laberinto y es incapaz de hallarla, acabando donde los monstruos tratan de hallar que los zombies de Mozart, Bach y Beethoven compongan algo para el cumpleaños.

Él tiene como función que la música sea un poco mas movida. Tocando un rock y realizando que todos bailen, siendo los demás actos, como el bingo o el juego de acertar películas que siempre hacen, bastante más flojo.

Mientras cenan la rata regresa a olerlo y está próximo de descubrirlo.

Después se organiza una entretenida pelea de caballitos en la piscina, no dándose cuenta de que con el agua se le quitará el maquillaje, por lo cual Drácula provoca que se vacíe la piscina.

Tras ello trata de expulsarlo otra vez intentando de hipnotizarlo para lograr que olvide tanto el hotel como a los monstruos, aunque no trabaja por culpa de las lentillas, amenazando con chuparle la sangre si vuelve.

Pero mientras se va hace aparición Mavis, que le transporta hasta lo prominente del castillo, fascinada por visto que haya visitado muchos países.

Jonathan piensa lo bello que debe ser el amanecer desde allí arriba y le exhibe a la muchacha algo que jamás había visto, el amanecer, procurando que no le dé el sol.

Y cuando lo creía ya lejos, cede el techo cayendo Jonathan sobre Drácula en la sauna.

Le castiga a recolocar las mesas del comedor, aunque cuando el jóven revela que estas tienen la capacidad de volar se entabla entre ellos una persecución dentro de las mesas, conociendo Drácula lo entretenido que es hasta que chocan.

Pero entonces Jonathan desaparece tras ser por último descubierto por Quasimodo que trata de llevarlo hasta la cocina, intentando de evitarlo las armaduras por orden de Drácula, antes de que el cocinero lo convierta en picadillo.

Y después de muchos años Mavis habla por vez primera de amor

Tras rescatarlo del fuego, Drácula le exhibe un cuadro de una dama que el jóven identifica, ya que vio otro cuadro en el castillo de Lubov, conociendo su leyenda, que dice ella, Lady Lubov se enamoró de un conde y estuvieron muy enamorados, viviendo en el castillo de Lubov, donde tuvieron una hija, siendo contentos hasta que el castillo ardió misteriosamente y fallecieron los dos.

Drácula le enseña que la leyenda se equivoca, ya que el conde era él y solo murió ella, siendo los humanos quienes acabaron con ella.

Construyó el hotel para asegurar a su hija, pero en este momento ella siente algo por él.

Jonathan le dice que las cosas cambiaron y que tienen que modernizarse, aunque debe admitir que si salieran a la civilización seguirían sin ser aceptados, por lo cual escoge marcharse, convenciéndolo Drácula para que se quede a la fiesta.

Todos se organizan para la fiesta, que esperan sea un éxito, realizando con luces los monumentos más conocidos de todo el mundo para que los logre comprender, lo que terminantemente la conquista, por lo cual ella termina besando al jóven.

Y cuando su padre los regaña, ella dice que quiere volver a salir a comprender mundo.

Gracias a la discusión, Drácula termina reconociendo que el pueblo no existe y que fue un montaje listo por él para que se asustara y no quisiera salir, logrando así estar cuidada.

Irrumpe entonces en la fiesta Quasimodo que declara que Jonathan es un humano, ocasionando el pánico popularizado entre los monstruos.

Pero entonces ella dice que le otorga lo mismo y que más allá de que es un humano quiere estar con él, frente lo que el jóven dice que él no quiere estar con ella, ya que odia a los monstruos, por lo cual se marcha, quedando la fiesta suspendida.

Poco después Drácula encuentra a su hija sobre el tejado, pidiéndole a su padre que le borre la cabeza, ya que descubrió que los humanos odian a los monstruos.

Tiene con ella el libro que le dejó su madre y que su padre le entregó al cumplir los 118 años en el que le rebelaba que ella encontrará a su amor como lo encontró ella.

Drácula les pide a los monstruos que le ayuden a hallar a Jonathan, ya que piensa que el jóven más allá de ser un humano es una aceptable persona.

Los monstruos deciden asistirlo a hallar al joven, llegando tras su pista hasta Transilvania donde se festeja un festival de monstruos, logrando por medio de ello pasar desapercibidos, aunque hay tanta gente que les impedirán llegar a tiempo hasta el campo de aviación, por lo cual tienen que demostrarles que son los reales monstruos, aunque en lugar de asustarse alcanzan que los humanos les aplaudan.

Les comentan la necesidad que tienen de llegar al campo de aviación y la multitud escoge empujarlos abriéndoles sendero y tapando la luz del sol para evadir que Drácula muera.

Llegan más allá de todo tarde al campo de aviación, habiendo ya despegado el avión con Jonathan dentro, debiendo Drácula volar hacia el mismo, estando próximo de fallecer quemado por el sol.

Por medio de sus poderes hipnotiza a uno de los pilotos, al que le hace decir en voz alta lo que él le transmite, pidiéndole así perdón a Jonathan, ya que su hija lo quiere y piensa que están hechos el uno para el otro, realizando tras ello que el piloto dé media vuelta y regrese a Transilvania.

Vuelven tras ello al hotel, donde le dice a su hija que quiere que viva su historia, tras lo cual le exhibe que trae con él a Jonathan, que le afirma que mencionó que no la quería por miedo a que su padre le chupara la sangre si decía lo opuesto, por lo cual tras admitir que la quiere se besan, celebrándose tras ello una fiesta donde todos cantan contentos.

Calificación: 1