Marianela de Benito Pérez Galdos
Todas las heroínas de los amores románticos fueron bellísimas hasta agotar los adjetivos. Lánguidas quizás. Tuberculosa alguna. Solo Marianela es fea, solo ella tiene «un cuerpecillo chico y un corazón muy grande».
La fantasía del ciego se la piensa celestial, pero «los ojos matan» y la cruda situación se impone.
Marianela nos comunica la trágica vida de la joven Nela, huérfana de quince años, pobre, fea y deforme, enamorada de Pablo, de familia adinerada, hermoso joven de diecinueve años, dotado de todas las perfecciones probables, pero ciego. Estas dos criaturas se perfeccionan mutuamente. Pablo ve con los ojos de Marianela y ésta se siente hermosa en el planeta interior de Pablo…
Esta historia, en que el patetismo queda suavizado con leves pinceladas de ironía y toques de humor, aún le ofrece pie a Galdós para denunciar «el embrutecedor trabajo de las minas», «el positivismo de las aldeas», los «desiertos sociales» y «las singulares prácticas de una sociedad que no sabe ser caritativa sino bailando, toreando y jugando a la lotería».
Personajes de Marianela
Marianela, personaje importante. Una muchacha con fachada de niña. Huérfana y al amparo de la misericordia de la multitud. Sus últimos meses vivió feliz y enamorada de su amo Pablo. Tuvo una vida llena de desdichas.
Pablo, personaje importante. Joven ciego, de muy buena posición recurrente que conocía sus tierras como la palma de su mano y disfrutaba de la compañía de la Nela y de las lecturas de su padre. Joven muy sensible e capaz.
Teodoro Golfín, hombre de mediana edad, bondadoso y de principios rectos. Médico que le ofrece el don de la visión a Pablo e intenta socorrer a la Nela.
Francisco Penáguilas, personaje secundario. Padre de Pablo que se desvive por darle a su hijo todas sus riquezas. Hombre capaz y bueno.
Florentina, personaje secundario. Prima de Pablo que llega al pueblo para la operación de Pablo. Muy bondadosa y hermosa. Futura mujer de su primo.
Carlos Golfín, personaje secundario. El ingeniero solicitado de las minas.
Resumen de Marianela
CAPÍTULO 1: Perdido
Golfín sale para abarcar a su hermano en las minas de Socartes. Mientras continua con su paseo, Golfín musita para sí adelante, siempre adelante, son las expresiones estas por las últimas personas que encontró a su paso y que indicaban la ubicación de las minas. Después de muy caminar, Golfín encuentra un campo de explotación minera, su desconcierto sobrevino al comprobar que se encontraba abandonado. Mientras se sobreponía de su desconcierto, Golfín está con un joven que le sugiere que acertadamente está en la mina Socartes, pero muy lejos del lugar que es en este preciso momento la entrada importante. El joven brinda servirle de guía hasta allá. La última sorpresa que almacena la noche para Golfín es que el amable joven que le serviría de lazarillo es ciego.
CAPÍTULO 2: Guiado
Ya una vez emprendida la marcha rumbo la entrada importante, Golfín sigue asombrado de que un joven ciego sea su guía. Mientras recorren el dificultoso sendero, el joven hace una descriptiva descripción de lo que a su paso encuentran. El joven se ve poder prescindir completamente de la visión para cubrir con colosal precisión la ubicación y composición de las cosas que lo cubren. Cuando hubieron paseo una de las cuevas están con la muchacha que ya antes Golfín había escuchado mientras se encontraba perdido—es Marianela—repuso el joven ciego—ahora ella tiene como función llevarlo a las áreas de trabajo. Golfín y el se despiden con la promesa de volverse a hallar y así empieza una amistad.
CAPÍTULO 3: Un diálogo que servirá de exposición
Golfín es guiado por Nela hacia las áreas de trabajo de la mina. La curiosidad que le despierta su novedosa guía hace a Golfín hacerle una pregunta a Nela sobre su crónica. Así es como Golfín se entera de que Nela es huérfana. Ella misma le cuenta las desventuras que pueblan su pasado y su presente. Golfín se llama la atención al escuchar de nuestra Nela la pobre opinión que de sí misma tiene. Nela enseña a Golfín cuál es el origen de su nombre; le habla de Canela, su madre. Golfín afirma que es sólo el joven Pablo el que exhibe aprecio hacía Nela. Ya una vez cerca de la mina, las notas de un piano y el anuncio de Nela comunican a Golfín que está cerca de su ansiado acercamiento con Carlos, su hermano.
CAPÍTULO 4: La familia de piedra
Un rincón de la vivienda de los Centeno es lo único que por morada tiene la Nela. El castigo y la displicencia que de ellos recibe Nela, es únicamente una consecuencia de la indiferencia y el castigo que los propio hijos del matrimonio Centeno reciben. Los Centeno son un matrimonio ocupado en la acumulación del dinero producto del trabajo en la mina de todos los correspondientes de la familia. El hijo menor—Celipín—era el único con misiones más allá del trabajo en la mina, y el único con quien Nela se relaciona. Su relación se estrecha cada vez más desde la cooperación de ella en los proyectos misterios de Celipín para estudiar. Nela es también la única que asistencia para llevarlos a cabo, cada que tiene ocasión la Nela le cede el dinero con que la multitud obsequia los favores recibidos de ella.
CAPÍTULO 5: Trabajo, paisaje, figura
El amanecer llega a la mina de hierro y sus alrededores. El pueblo se despierta con la campana—los hombres van de sus viviendas para ingresar otro día al trabajo durísimo de la mina, las mujeres a lavar el mineral extraído, las mulas a cargar otra vez su labor sobre lomos. Con la salida del sol, Socartes y su población resplandecen purpúreas, el fino polvo que es subproducto de la siderurgia. La Nela también sale, a la vivienda de Pablo, el joven ciego que acompañaba a Golfín el día previo. Nela, el lazarillo de Pablo, sale con él a caminar por los campos.
CAPÍTULO 6: Tonterías
Nela, Pablo y el perro Choto caminan hacia el bosque. Como todos los días que van, Pablo trae a Nela unos regalitos: un dulce, un chocolate, unas nueces. Son las pequeñas riquezas que le faltan a Nela en su crónica frugal con los Centeno. Nela enseña la dicotomía de su vida: de día anda feliz en sus salidas con Pablo pero de noche no encuentra la alegría en el sitio de vida. En el sendero, ella señala los datos del campo y le brinda sus propias explicaciones supersticiosas de la naturaleza: como que las estrellas son almas salvas que bajan del cielo a revelar misterios a los humanos. Pablo le dice que le pedirá a su padre que la enseñe a leer, para que consigua utilizar sus dones intelectuales y creativos para realizar mejor con la educación y razón.
CAPÍTULO 7: Más tonterías
Nela y Pablo llegan a la entrada del bosque, de donde se puede observar un pedazo del mar a la distancia. Se sientan juntos para reposar entre unos nogales, y Pablo cuenta a Nela de los libros de historia y ciencia que su padre le leía por las noches. Pero la noche previo su padre leyó de Las mil y una noches una descripción de la hermosura. Pablo confiesa a Nela que no requiere utilizar sus ojos para abarcar que ella es el epítome de la hermosura como en el libro… una mujer modesta, cariñosa, hermosa como los ángeles. Nela niega que sea una mujer así—en la verdad es una mujer fácil y fea. Pablo lamenta que la visión haya robado a los hombres la aptitud de cubrir la hermosura verídica y admite que está enamorado de ella. Después, la pareja vuelve a casa, para hallar el padre de Pablo con Golfín.
CAPÍTULO 8: Prosiguen las tonterías
Pablo comparte con Nela la promesa que inunda su espíritu al escuchar de Golfín y de su padre que el destino almacena para él la promesa de ver. Pablo traduce su promesa en la concreción del anhelo por ver a su querida Nela. Por su lado, Nela comparte la esa de Pablo por volver a abarcar, por otro lado en su corazón crece la zozobra de que una vez recuperada la visión de Pablo, la hermosura que él asigna a su espíritu no coincida con su exterior. La noche previo Pablo no logró reposar por el arrebato de esperanzas que provocaron en él las buenas novedades, por lo cual se quedó dormido en el regazo de la Nela a lo largo de su recorrido, hasta el día de hoy Nela creía escuchar la voz de su madre que provenía del fondo de la Trascava…
CAPÍTULO 9: Los Golfines
A poco tiempo de haber llegada a la mina, Golfín la conoce de punta a punta. Cuando hace buen día, la familia Golfín agrada de hacer caminatas por los alrededores de la mina, cuando no, la familia se reúne en torna al piano y se deleitan cantando. Sofía(su cuñada)era aficionada a la proyectos de caridad, en Madrid había ordenado algunos eventos en provecho de los pobres, a eso que Golfín le reprocha su falta de atención a los pobres de su alrededor, en especial de Nela. Al matrimonio Golfín no le sobrevivía ningún hijo, por lo cual Golfín recomienda que podrían adoptar a Nela. Después de un hecho la Nela se espina un pie y Golfín la transporta en hombros de regreso a casa.
CAPÍTULO 10: Historia de dos hijos del pueblo
A Sofía y Carlos, Golfín cuenta la narración de él y su hermano, mientras Sofía bromea insinuando que está exagerando muy. Golfín les cuenta como aprendió a leer, como entró en el Escalapios, cómo estudiaba la medicina, y cómo los hermanos se cuidaban en sus adversidades financieras mientras. Sigue relatando como Carlos encontró trabajo y Golfín salió para América. Después del relato, Carlos admira a su hermano Teodoro por su determinación en devolverle la visión a Pablo, mientras Sofía sigue burlándose de él. Llegan los tres en compañía de Nela a la vivienda de Don Penáguilas. Atardece.
CAPÍTULO 11: El Patriarca de Aldeacorba
Después del recorrido, la familia Golfín en compañía de la Nela se dirige a casa de Don. Francisco quien los recibe con un vaso de leche recién ordeñada. Don. Francisco externa a la familia Golfín su alegría por la promesa que Golfín ofrece a Pablo de volver a abarcar. De la misma manera comparte su preocupación por la febril imaginación de Pablo, que en últimas fechas sólo tiene como función un pensamiento a abarcar que la Nela es una chica hermosa. Golfín sugiere a Don. Francisco que suspenda las lecturas y que provea a Pablo del más grande de los sosiegos a fin de que el cerebro de Pablo se encuentre en buen estado para la futura operación…
CAPÍTULO 12: El doctor Celipín
De vuelta en el sitio de vida de los Centeno, Nela distribución a Celipín los dos duros que extensamente le dio Golfín para que se comprara zapatos. Como de práctica Nela y Celipín hablan un antes de reposar sobre los proyectos de éste para irse de casa y estudiar. Nela cuenta a Celipín la vida de contrariedades que vivieron los hermanos Golfín antes de ser hombres de bien, la historia le sirve de inspiración a Celipín, quien escoge que quiere continuar los pasos de Teodoro Golfín y así transformarse de la misma manera que él en un médico respetable. Celipín intenta persuadir a la Nela de que se marche con él, arguyendo que después de que Pablo recupere la visión nada le queda por hacer a Nela en Socartes.
CAPÍTULO 13: Entre dos cestas
Como leyentes entramos a los pensamientos y la narración de Nela. Aunque la filosofía de ella esté fundamentada en una mezcla de paganismo y sentimentalismo, repudia la imagen espantosa de Dios, mas reconoce las expresiones del Evangelio y el poder de la Virgen María, quien, para Nela, personifica la hermosura ideal en forma humana. Nela pregunta a la Virgen por qué la logró tan fea y le pide que la realize hermosa para que cuando la Virgen otorgue la visión a Pablo, él no la encuentre muy fea. Ella quiere a Pablo, pero quiere que jamás abra los ojos para mirarla.
CAPÍTULO 14: De cómo la Virgen María se apareció a la Nela
Al llegar la mañana y como de práctica la Nela dedica algunas oraciones a la Virgen María. Nela hacía reposar en las divinas facultades de la madre de Dios el hallar un feliz desenlace para ella y para Pablo. A lo largo de sus quehaceres Nela repetía para sí las expresiones estas por Pablo sobre las vivencias anteriores a un temblor. Nela podía sentirlas, no sabía si sería algo positivo o no, pero estaban ahí. Ya una vez en el campo y continuando con sus cavilaciones, la Nela se ve asombrada por la aparición de la Virgen, creyó verla en persona a eso que quedó petrificada, de a poco se repone de su sorpresa y cae en la cuenta de que hablamos de Florentina, le hermosa prima de Pablo, quien a he venido en compañía de su padre para ultimar los datos de la boda que tienen premeditado sus padres para ella y Pablo.
CAPÍTULO 15: Los tres
Pablo y Nela van a exhibir a Florentina las minas. Platican de la ceguera de Pablo, Florentina cuenta que le esperan algunos chascos cuando adquiera la visión, y Nela comienza a ponerse nerviosa. Florentina pregunta por la desigualdad que provoca que Nela traiga un vestido viejo mientras ella tiene uno bonito. Escoge que va tener a Nela como su amiga, que le va a socorrer , que le enseñará a ser una mujer de casa útil. Florentina se aleja un poco, y Pablo explota para decir a Nela que su prima le resulta una mujer hermosa. Las intranquilidades de Nela siguen creciendo.
CAPÍTULO 16: La promesa
Golfín ejecuta la cirugía de Pablo sin abarcar cuáles serán los resultados. Pablo pasa numerosos días encerrado, atendido sólo por su padre, por lo cual nadie más sabe si la operación fue triunfadora. Florentina acompaña a Nela a la vivienda de los Centeno, y sale horrorizada de las condiciones en las que vive Nela. Reafirma su promesa de comunicar con lo que ella misma ha recibido. Ocho días después de la operación, Nela pasa a la vivienda de Sofía, quien le dice que hay el rumor de que Pablo ya puede ver. Y en este preciso momento con la vista—Sofía le dice—, es sin lugar a dudas el joven Pablo se va a casar con la señorita Florentina. Carlos llega para corroborar el milagro de su hermano, sí, Pablo ya tiene el don de la visión.
CAPÍTULO 17: Fugitiva y meditabunda
La novedad de la operación de Pablo llega por todo el pueblo, pero Nela impide continuar a la vivienda de los Penáguilas. Anda por días como fugitiva en el campo, orando a la Virgen y suponiendo que Dios quiere que ella sufra. Llegando a su casa, Nela está con Florentina, que quiere llevarla a abarcar a Pablo. Florentina la convence de que venga a vivir con ella y a abarcar Pablo, pero mientras se aproximan a la vivienda de los Penáguilas, Nela huye, enseñando que no puede ir. Confusa, Florentina vuelve a casa, diciendo a Golfín que Nela se escapó por su ingratitud.
CAPÍTULO 18: La Nela se escoge a partir
Nela sigue vagando en el campo, pero por las noches se aproxima a la vivienda de los Penáguilas sin que nadie lo note. Vuelve al bosque y encuentra a Celipín en el sendero. Él ha salido de la vivienda y quiere escaparse con Nela para jamás volver a abarcar a sus padres. Nela repudia la iniciativa, diciendo que no es su tiempo para irse de las minas y Celipín se despide de ella. Choto, el perro de Pablo, revela a Nela vagando, vuelve a la vivienda de los Penáguilas, y señala a Golfín que la encontró. Golfín entra en el bosque con Choto y encuentran a Nela, quien sale corriendo y baja a la Trascava. Después Golfín la convence que suba para que consigua mencionarle una cosa.
CAPÍTULO 19: Domesticación
Golfín llama la atención a Nela justo a tiempo, ya que ésta intentaba despojarse de su propia vida bajo la falsa creencia de que la vida depararía para ella una mejor suerte una vez muerta. Golfín la persuade de no quitarse la vida y la exhorta a que habrá su corazón frente él, única persona lista para preocuparse por los asuntos que aquejan su corazón. La Nela confiesa a Golfín el cariño que profesa a Pablo y las promesas de no separarse jamás que Pablo logró a la Nela. Le confiesa también el fundamento por el cual escoge marcharse, de cómo siente celos de Florentina. En el desenlace Golfín, después de hacerle ver a Nela, que más allá de que está desprovista de hermosura exterior, su excelencia de espíritu la hacían un ser excepcional. Al cabo de un rato vuelven a Aldeacorba donde Golfín muestra a la Nela en la habitación de Florentina.
CAPÍTULO 20: El nuevo mundo
El complot retrocede hasta el día que Golfín quitó el vendaje de Pablo. Al inicio Pablo tiene miedo de su nuevo mundo, pero de a poco le agradece y está inundado con la hermosura a su alrededor. Ve primero a Florentina, equivocado, piensa que es Nela. Pablo no puede creer que su prima sea tan hermosa, y le ruega que se quede con él mientras se está recuperando. Pablo confiesa a su prima que quiere a Nela, y pide a Florentina la traiga frente él. Florentina encuentra a Nela, pero Nela se escapa, y Florentina piensa que lo ejecuta por ingratitud. Pablo está seguro de que Nela vendrá sola, a su tiempo. Durante la noche él escucha las voces de su padre, Golfín y Florentina. Al día siguiente se levanta de la cama por primera ocasión desde su operación.
CAPÍTULO 21: Los ojos matan
La mañana en que la Nela despertó en la habitación de Florentina, el padre de ésta le anunciaba que en ese instante D. Francisco hablaba con Pablo sobre el asunto de la boda. Golfín que estaba allí, preocupado por el estado de Nela, le señala a Florentina la desventurada vida que tuvo que llevar la Nela por la sepa de un alma que consigua ocuparse del mínimo precaución de Nela. Al cabo de un momento, entra a Pablo, quien se había quitado ya el vendaje e iba a expresar a Florentina la esa que le provocaba la futura unión entre los dos. La Nela, que hasta el día de hoy pasaba inadvertida en el sofá, llama la atención de Pablo, quien se dirige a ella y al sentir la mano de la Nela sobre la suya se ofrece cuenta que hablamos de ella, Pablo clava su mirada sobre Nela, y ésta al sentir el peso de la mirada de Pablo empieza su descenso a las profundidades de la desaparición. Golfín, frente la frustración e impotencia de no poder socorrer a Nela acaba por exclamar que ¡Nela ha muerto de amor…!
CAPÍTULO 22: Adiós
Nela, quien jamás tuvo bienes materiales ni reconocimiento en la vida, tiene un funeral al que asiste todo el pueblo y un sepulcro magnífico obsequiado por Florentina. Para sorpresa de los que la conocían, su muerte llamó la atención de varios. Meses después cuando ya todos se habían olvidado de Nela, Pablo y Florentina se habían casado, llegaron unos individuos extranjeros al sepulcro de Nela. Señalan en una cartera que el sepulcro es de una mujer noble y hermosísima, la Doña Mariquita Manuela Tellez (Nela). Después publican su descripción como Sketches from Cantabria. Los noteros investigaban la realidad, pero no la hallaron, que es la razón por la cual el constructor redacta este mismo libro: para que sepan los que leen la verídica historia de Nela, una de las más atrayentes que hay.
Otros
Época y lugar en que se transporta a cabo la obra
La obra se transporta a cabo a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX, al norte de España en un pequeño pueblo llamado Aldeacorba.
Movimiento literario al que forma parte la obra
La obra forma parte al realismo español porque exhibe puntos indispensables de los aconteceres sociopolíticos de la época de Galdos. Además la relación entre Pablo y Nela exhibe la forma de accionar de la burguesía de esa época.
Genero y subgénero
El genero es épico porque narra los hechos que le suceden a los individuos en ese tiempo de tiempo. El subgénero es novela porque tiene una trama amplia y dificultosa y además de contar lo que le pasa a sus individuos se atrae por el ámbito en que estos se desarrollan y como este los daña.
Persona gramatical en que esta redactada la obra
La obra esta redactada en 3ra persona porque el constructor narra las oportunidades por las que sucede un grupo de individuos y no habla de él.