Cometí un fallo, ¿conforme? Ahora necesito un plan B Cuando conocí a Kyle Kingston, supe que sería un fallo. Uno exquisito, mas un fallo al fin y a la postre. Pasamos una noche juntos y, cuando desperté, se había marchado. Poco después, descubrí que me había dejado encinta. Necesito encontrarlo y decírselo, y tengo un plan: me voy a colar en la celebración de jubilación de su abuelo, procuraré a Kyle y le voy a dar la buena nueva. ¿Qué podría salir mal? Vuelve Jana Aston con una novela sensual y amena