Siglo V a.C. Asia se halla ocupada por el enorme y también invencible Imperio Persa, cuyo nuevo objetivo es conquistar a la dividida Grecia. Mientras que las polis griegas se preparan para la guerra, aprovechando este enfrentamiento, revienta una revuelta de esclavos ilotas en el norte de Lacedemonia. La labor de sofocarla antes que vaya a más es encargada a Talos, veterano oficial del ejército espartano, quien deberá combatir a los rebeldes con el pequeño conjunto de hombres que le dejan llevar consigo, encontrándose entre ellos Damon, un joven y valiente soldado bajo el mando de Talos. No obstante, el conjunto espartano halla un contrincante considerablemente más abundante y fiero del que aguardaban, siendo derrotados tras combatir con ellos. Desde entonces, Talos y Damon deberán subsistir enfrentándose a incontables contrincantes y superando todo género de contrariedades para regresar con sus familias a Esparta, desde ser capturados y vendidos como esclavos a pasar por los desiertos de Libia y Egipto, siendo asimismo testigos desde el bando que menos aguardaban de como la batalla final entre helenos y persas se aproxima.