. Una novela con el sello propio de la autora, fácil, bien escrita y tan bonita, que desearás que no se acabe.
. El estilo fácil, dulce y efectivo de Elena Castillo vuelve a cautivarnos con una historia de personajes heridos que desean regresar a enamorarse.. Con una ambientación deliciosa, Irlanda se transforma en un personaje más de la novela. Los paisajes enmarcan escenas románticas y el ánima melancólica del país termina impregnándolo todo.
Imogen precisa distanciarse de la persona que ha roto su corazón y de una familia que considera que no es capaz de cuidarse por sí misma, quiere iniciar de cero. El inconveniente es que no sabe de qué manera hacerlo pues se ha dado cuenta de que de verdad no se conoce a sí.Por ello, su mejor amiga lo va a organizar todo para llevarla consigo hasta Irlanda, donde le espera su primer puesto en una vivienda clínica como enfermera y una habitación de alquiler en una hermosa cottage a los pies de los barrancos de Howth, que compartirá con un joven pescador.
Absolutamente nadie en el pueblo aguardaba que Liam regresara tras tanto tiempo, mas asimismo se sorprende cuando al llegar se halla con que su familia ha metido a una inquilina en su casa.Mientras Imogen va a ir descubriéndose poquito a poco con su «lista de nuevas experiencias», su enigmático compañero de casa se volcará en asistirla a lograr sus desafíos, acabando por poner a prueba los sentimientos de su corazón.
3 pacientes con mucho que aportar, un club de lectura con algo de magia y una amistad inalterable, van a enseñar a Imogen que en la vida solo hay que saltar las olas.»La mejor manera de sanar un corazón es salvar a otro»
