A sus 28 años, Penélope se ha resignado ya a transformarse en una solterona destinada a avejentar cuidando a su madre. A lo largo de una década, ha asistido a todas y cada una de las fiestas de la aristocracia londinense, y siempre y en toda circunstancia ha sido la chica mediocre, muda, la que absolutamente nadie saca a danzar más que por compromiso, la que pasa desapercibida para todos. Asimismo para Colin Bridgerton, hermano de la mejor amiga de Penélope, guapo, valiente, soltero de oro… y su amor platónico desde siempre y en toda circunstancia. Para Colin, Penélope siempre y en toda circunstancia ha estado ahí, simpática, agradable, mas prácticamente invisible. ¿De qué forma posiblemente todo cambie de súbito? Sin saber bien de qué manera, el menor de los Bridgerton descubre a una mujer inteligente, sensible, valiente… y atractivísima. A lo largo de años se han conocido prácticamente como hermanos, y de súbito se percatan de que no saben nada el uno del otro. Mas no todo cuanto descubrirán va a resultar tan agradable…